
LA MEMÒRIA
DO TERRA ALTA

El verano del 1938, las tierras de Vilalba dels Arcs, la Fatarella, las Camposines y Gandesa se convirtieron en uno de los escenarios más crueles de la Batalla del Ebro. Cada muro de piedra seca de Vall de la Novena, entre las cotas 481-Punta Targa y 548-Vértice Gaeta, fue trinchera por los soldados del frente. Todavía hoy encontramos sus huellas, entre ellas las de mi abuelo Agustín Pérez
La Garnacha o Vernatxa, tal como se la denomina en las tierras del Ebro, es la variedad más arraigada en el territorio y las personas que las habitan, convirtiéndose en la eterna guardiana de los paisajes y del recuerdo de todos los hombres y mujeres que de forma voluntaria o forzada, pisaron estas tierras hace 80 años. La vendimia del 1938 no existió, pues los pocos frutos que dieron, sirvieron de alimento y esperanza de vida para todos ellos y ellas. Hoy, como testigo mudo de la memoria, elaboramos un vino nacido en uno de estos viejos viñedos, escenario de dolor y esperanza.
EL VIÑEDO
Variedad: Garnacha Blanca 100%, de cepas viejas Suelo: Panal y Calcario
Viñedo: La Novena (Gaeta) Altitud: 500 msnm
Exposición: Noreste Agricultura Ecológica
Vendimia: Manual 0,5 ha - 1500kg/ha EL VINO
Vinificación en bocois de castaño de 650 litros Levaduras: Salvajes
Afinado 8 meses con las lías en la misma bota Sin filtrar



